CLAVES EN LA COMPRA DE UN CABALLO DE DEPORTE

Por Dr. Claudio Reynoso

Introducción

Adquirir un caballo de competición es una decisión que combina aspectos deportivos, clínicos y comerciales. Después de 30 años acompañando compras para clientes de turf, trote, criollos y equitación, presento una guía práctica orientada a minimizar riesgos clínicos y optimizar el valor del caballo según su destino deportivo. El objetivo es ofrecer un protocolo claro —desde la preparación previa hasta los exámenes complementarios— para que tanto entrenadores y propietarios tomen decisiones fundadas y reproducibles.

Desarrollo

1) Preparación antes de la visita: estudiar el ejemplar

Antes de ir al remate, venta particular o haras:

  • Revisar pedigrí, campañas de padres y hermanos, y resultados en pista (precocidad, distancia y superficie). La historia familiar aporta probabilidades relativas de potencial competitivo y de enfermedades hereditarias.

  • Pedir historial sanitario y reproductivo al vendedor: cirugías, lesiones previas, tratamientos repetidos (antibióticos, antiinflamatorios), y motivo de venta.

Práctica recomendada: preparar un «dossier» del ejemplar con: hoja genealógica, hojas de carreras, videos de performance (si existen).

2) Inspección inicial en el lugar: conducta y conformación

  • Evaluar temperamento (manejabilidad, respuesta al estrés) y conformación estática (ángulos, aplomos, equilibrio cuerpo/cabeza/miembros).

  • Observar la marcha en mano y en el cuadrilátero: trot-up a mano sobre superficie dura, y, cuando sea posible, valoración en movimiento montado o en cuerda para detectar asimetrías.

  • Registrar hallazgos mediante fotos y video para documentación.

3) Historia de cría y manejo del establecimiento

  • Consultar si otros animales criados en el mismo establecimiento han presentado problemas durante la doma, lesiones de crecimiento, o patología respiratoria recurrente. Esto puede indicar problemas de manejo (nutrición desequilibrada, pasturas con deficiencias, instalaciones sanitarias inadecuadas).

4) La presencia del veterinario: examen clínico dirigido

Siempre asistir con un veterinario que realice examen pre-compra (PPE) completo, adaptado al uso previsto del caballo. El PPE debe documentarse con un informe objetivo y una opinión basada en la aptitud para el destino deportivo del comprador. Las guías profesionales recomiendan estandarizar el proceso y dejar por escrito lo observado.

Componentes mínimos del examen veterinario

  • Historia clínica (incluyendo tratamientos, rendimiento previo, problemas respiratorios o digestivos).

  • Examen físico general (cardio-respiratorio, mucosas, linfonodos).

  • Examen ortopédico: palpación, flexiones (con cautela y registrando respuesta), trot-up a mano en línea recta y vuelta en círculo, evaluación montada si es posible.

  • Evaluación dental y de casco (estado de desgaste, presiones, clavos).

  • Examen de la vía aérea superior mediante endoscopía en reposo; si existe sospecha de obstrucción dinámica o antecedentes de ruido respiratorio al ejercicio, considerar endoscopía en ejercicio (overground/dynamic endoscopy). La endoscopía dinámica detecta alteraciones que no son visibles en el endoscopio en reposo y mejora la detección de obstrucciones que afectan el rendimiento. Pruebas complementarias básicas: hemograma y bioquímica (estado general), pruebas de infección relevantes según región (por ejemplo, EIA donde aplique), y análisis fecal si es pertinente.

5) Diagnóstico por imágenes y pruebas complementarias

En potrillos o ejemplares jóvenes y en caballos de alto valor competitivo, las pruebas complementarias aumentan la sensibilidad para lesiones ocultas:

  • Radiología: útil para detectar lesiones óseas y alteraciones articulares de superficie; sin embargo, la combinación de radiografía y ecografía mejora la sensibilidad para lesiones articulares y de tejidos blandos.

  • Ecografía: superior para evaluar tendones, ligamentos y lesiones de tejidos blandos. Estudios muestran alta sensibilidad para determinadas lesiones tendinosas y articulares cuando se usa correctamente.

  • Endoscopía dinámica (overground): recomendada si hay antecedentes de ruido respiratorio o pobre rendimiento; detecta obstrucciones dinámicas no visibles en reposo.

  • Centigrafía, CT o MRI: considerar en caballos de alto valor o cuando radiografías/ecografías no expliquen signos clínicos o rendimiento bajo. Hay lesiones subcondrales y quísticas que pueden pasar inadvertidas en radiografías y ser detectables por CT o gammagrafía.

  • Regla práctica: escalar los exámenes según el valor del caballo y el uso previsto. Para un potrillo destinado a alta competencia, incluir radiografías selectivas y ecografía; para ejemplares con antecedentes o hallazgos sospechosos, añadir endoscopía dinámica y/o estudios avanzados.

6) Hallazgos que deben encender alerta (banderas rojas)

  • Asimetría persistente en el trot-up, respuesta positiva y persistente a pruebas de flexión.

  • Ruidos respiratorios al ejercicio o intolerancia al esfuerzo (evaluar con endoscopía dinámica).

  • Cicatrices o signos de cirugía previa no declarada (tanto articular como respiratoria).

  • Alteraciones radiográficas en zonas habituales de osteocondrosis o lesiones subcondrales (tibiotarsal, stifle).

  • Tendinopatías ecográficas moderadas/avanzadas en un ejemplar joven.

  • Discrepancias entre lo declarado por el vendedor y lo detectado en el PPE.

7) Aspectos contractuales y retorno del animal

  • La existencia de un periodo de devolución tras la compra depende del contrato entre comprador y vendedor y de la normativa aplicable en la jurisdicción; no hay un periodo estándar universal. El comprador debería acordar por escrito cláusulas claras: plazo para reclamar, condiciones para devolución, procedimiento de peritaje y cobertura de gastos. Las asociaciones profesionales recomiendan la declaración del vendedor y la transparencia sobre intervenciones y enfermedades previas.

Checklist rápido pre-compra

  1. Dossier previo: pedigrí, rendimiento familiar y videos.

  2. Presencia del veterinario para PPE completo (documentado).

  3. Trot-up y evaluación ortopédica dinámica.

  4. Endoscopía en reposo; planear endoscopía en ejercicio si hay antecedentes de ruido/baixa performance.

  5. Radiografías y ecografía según edad/uso; escalar a CT/MRI o gammagrafía cuando el valor lo justifique o signos confusos persistan.

  6. Documentar todo por escrito y acordar cláusula contractual de resolución de disputas/devolución.

Referencias

  • AAEP — Guidelines for Reporting Purchase Examinations. AAEP

  • BEVA — Vet guide to pre-purchase examination. beva.org.uk

  • Estudios comparativos radiografía vs ecografía para detección de lesiones articulares y de tejidos blandos. Wiley Online Library+1

  • Overground/dynamic endoscopy: relevancia para detección de obstrucciones dinámicas. PubMed+1

  • Documentación sobre lesiones subcondrales / subchondral cystic lesions y limitaciones de radiografías; utilidad de CT/escintigrafía. ResearchGate+1